
Yemen: Primera planta de conversión de residuos en energía ayuda a la región de Lahij a reducir la crisis energética
La primera planta de conversión de residuos en energía, financiada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), funciona en la gobernación de Lahij, se trata de una iniciativa única para ayudar a eliminar los residuos y generar electricidad.
Imágenes del domingo muestran cómo se utilizan cartones y serrín para formar cubos que luego se transportan a una incineradora para generar electricidad.
El director de la planta, Imad Aidarous, explicó que la planta utiliza los residuos agrícolas y animales, así como el serrín, para generar hasta 100 KW de electricidad, mientras que los residuos de producción se utilizan para producir fertilizantes naturales, alquitrán de hulla y gránulos de plástico, que son de gran utilidad. Según la UNPD, la planta procesa diariamente 5 toneladas de residuos sólidos y agrícolas, y puede generar 100 KWh de electricidad, y 1 tonelada de residuos.
Esto es suficiente para hacer funcionar 100 tiendas y proporcionar casi 7.500 oportunidades de trabajo para los pobres de las zonas rurales. El proyecto adopta un sistema integral de gestión de residuos sólidos, lo que anima a los miembros de la comunidad a reciclar y reducir los residuos. La planta produce energía eléctrica más barata que la producida a partir de combustibles fósiles, al tiempo que reduce las emisiones.
En la actualidad, las autoridades están estudiando la posibilidad de implantar el proyecto en otros lugares de Yemen, que sufre una crisis energética y de reciclaje de residuos desde que estalló la guerra.

La primera planta de conversión de residuos en energía, financiada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), funciona en la gobernación de Lahij, se trata de una iniciativa única para ayudar a eliminar los residuos y generar electricidad.
Imágenes del domingo muestran cómo se utilizan cartones y serrín para formar cubos que luego se transportan a una incineradora para generar electricidad.
El director de la planta, Imad Aidarous, explicó que la planta utiliza los residuos agrícolas y animales, así como el serrín, para generar hasta 100 KW de electricidad, mientras que los residuos de producción se utilizan para producir fertilizantes naturales, alquitrán de hulla y gránulos de plástico, que son de gran utilidad. Según la UNPD, la planta procesa diariamente 5 toneladas de residuos sólidos y agrícolas, y puede generar 100 KWh de electricidad, y 1 tonelada de residuos.
Esto es suficiente para hacer funcionar 100 tiendas y proporcionar casi 7.500 oportunidades de trabajo para los pobres de las zonas rurales. El proyecto adopta un sistema integral de gestión de residuos sólidos, lo que anima a los miembros de la comunidad a reciclar y reducir los residuos. La planta produce energía eléctrica más barata que la producida a partir de combustibles fósiles, al tiempo que reduce las emisiones.
En la actualidad, las autoridades están estudiando la posibilidad de implantar el proyecto en otros lugares de Yemen, que sufre una crisis energética y de reciclaje de residuos desde que estalló la guerra.